La gestión de la calidad es crítica para la confianza en el ciclo de vida de la entrega de software. Este proceso se articula a través de dos disciplinas esenciales y complementarias: Quality Control (QC) y Quality Assurance (QA). El éxito en este ámbito depende intrínsecamente de una gestión de datos de prueba (Test Data Management - TDM) consistente.
¿Qué es QC (Quality Control) y cuándo aplicarlo?
Quality Control es la disciplina detectiva que valida un entregable frente a especificaciones, políticas y riesgos aceptados. Su foco está en demostrar, con datos y evidencias, que el software está listo para el entorno objetivo. Priorizar QC es esencial cuando hay releases frecuentes, SLAs exigentes o superficies de cambio amplias: en esos escenarios, la solidez de las suites automatizadas, las pruebas no funcionales (rendimiento y seguridad) y la gestión rigurosa de defectos determinan la estabilidad del producto.
¿Qué es QA (Quality Assurance) y cuál es su alcance?
Quality Assurance estructura el sistema de calidad: define políticas, estándares, responsabilidades y quality gates que estabilizan el proceso desde la ideación hasta el despliegue. QA no “hace testing” en sentido estricto; diseña el marco que reduce variabilidad, mejora la trazabilidad y limita el defect leakage. Su alcance incluye criterios de aceptación consistentes, matrices RACI, umbrales de cobertura y una estrategia de datos de prueba (TDM/provisioning) que permita reproducibilidad y cumplimiento normativo.